1
Pavimentos de la Calle Oficios con abundantes ammonites
Es una calle pequeña que está delante de la Capilla Real y la Lonja. Su pavimento tiene una franja central de empedrado granadino y dos franjas laterales de calizas de Sierra Elvira en las que se pueden observar numerosos ammonites.


2
Muros de calcarenita de la Capilla Real y la Lonja de Mercaderes
Ambos edificios están adosados y fueron construidos en el primer cuarto del siglo XVI. En ambos casos se emplearon calcarenitas en las que podemos observar fósiles, entre los que destacan los bivalvos. La Capilla Real tiene un pórtico de calizas de Sierra Elvira y está coronada por agujas y gabletes esculpidos en calcarenitas.



3
Pavimento de la Plaza Alonso Cano de calizas con crinoides
La caliza con crinoides de Sierra Elvira se ha utilizado el pavimento de la plaza de Alonso Cano. Esta caliza de color gris-crema contiene muchísimos fragmentos de crinoides, o lirios de mar, que abundaban en los fondos marinos del Jurásico.
4
Pavimentos de la Plaza de las Pasiegas (calizas con crinoides y calizas crema de Loja)
La caliza Crema de Loja, de color claro, también se utilizó para el pavimento. En ella se pueden ver abundantes oncolitos, gasterópodos y bivalvos que se depositaron en un ambiente marino somero durante el Jurásico en Sierra Gorda (Loja).
5
Muros de calcarenita la Catedral
Fue edificada en el siglo XVII.
Para la construcción de los muros exteriores de la Catedral se utilizaron calcarenitas ricas en bioclastos (trozos de bivalvos, gasterópodos, briozoos, corales, etc.), y travertinos de origen continental procedentes de Alfacar.
La Catedral es uno de los pocos edificios monumentales de Granada que no tiene un pórtico de calizas con crinoides.




6
Edificio del mercado de San Agustín
de calcarenita con equínidos
Está situado en el centro de la ciudad, muy próximo a la Catedral. Es una construcción muy reciente.
Los muros del mercado de San Agustín fueron revestidos con una calcarenita de color crema de origen marino somero rica en algas rojas y erizos que provienen de Huéscar (Granada). La edad de estos materiales está comprendida entre 8 y 9 millones de años.